martes, 5 de abril de 2011

El Jardín de la Especulación Cósmica


Los jardines pueden ser en sí mismos bellos y bucólicos, pero la mano del hombre puede tunearlos hasta arrancarles nuevos matices, como si entonces fueran los escenarios de algún cuento de hadas. Son bien conocidos los jardines con laberintos artificiales o decorados con arbustos que han sido podados para parecer esculturas de animales u objetos.
Pero si existe un jardín que lleva hasta sus últimas consecuencias esta obsesión por mejorar a la naturaleza o ajustarla a nuestros parámetros culturales o ficcionales, éste es El Jardín de la Especulación Cósmica. Ha sido concebido por el arquitecto y paisajista norteamericano Charles Jencks, y podéis visitarlo en Escocia, en Portrack House, en la región de Dumfries.
Ocupa unas 15 hectáreas y es privado: pertenece a la familia Keswick. Aunque permite el acceso al público en algunas ocasiones.


Dejando a un lado las interpretaciones artísticas que quiere imprimirle al autor a este jardín (caos, los planos cuánticos, los fractales, los agujeros negros y demás), lo llamativo de este lugar es el aspecto de su arquitectura, un cruce entre una pesadilla y parque de atracciones.
Por ejemplo, la misma entrada al jardín se realiza atravesando una puerta denominada Zeroroom, que consiste en un pasillo con sucesivos iconos que se ubican de mayor a menor, desde el Universo hasta la Vía Láctea, a continuación en el Sistema Solar y la Tierra, y por último en el punto exacto de Escocia donde os encontráis vosotros. Como si fuera un viaje desde los más remotos confines del universo hasta el parque.
En un estanque también se ha recreado la sopa primigenia que dio origen a la vida en la Tierra. En una zona, llamada el rincón del ADN, se alude a la teoría del gen egoísta planteada por el científicoRichard Dawkins en su obra El gen egoísta, la cual postula que el ser humano simplemente es un vehículo para los genes, y que éstos nos manipulan para sus propios fines, sobre todo reproductivos.

También hay una escalera zigzagueante que progresivamente se va ensanchando, cuya metáfora, por más que la leo, no logro entender (así que me ahorro escribirla). También hay sitio para un ondulante camino de listones que culmina en un puente oriental: el aleteo de una mariposa en un lugar del mundo puede generar un huracán en la otra punta del mundo, gracias a la teoría del caos.


Sitio Oficial | Charles Jencks

viernes, 25 de marzo de 2011

TEATRO AGORA / UNStudio




UNStudio en colaboración con B+M y Den Haag realizaron el proyecto Teatro Agora ubicado en Lelystad-Holanda siendo parte de un plan maestro para revitalizar el centro de la ciudad y ciudades de la post-guerra. Se inspiraron en la función original del teatro que es crear mundos artificiales y de encantamiento.
El edificio de apariencia deconstruida tanto en el interior como en el exterior manifiesta la reinterpretación de un mundo caleidoscópico, en donde las representaciones dramáticas o cómicas no solo forman parte del escenario, sino que se impregnan en el edificio tanto en forma como en lo colorido. 


La piel del edificio envuelve a los 2 auditorios que se encuentran muy alejados por razones acústicas, además el programa arquitectónico cuenta con un espacio mayor y un menor para el teatro, una torre de escenario, foyers (vestíbulos) separados, vestidores, salas multifuncionales, un restaurante y un café, varios espacios interconectados y el volumen sobresaliente de todo el conjunto contiene la maquinaria del escenario. 



Las fachadas son de placas laminadas de acero y vidrio en color amarillo y naranja. Al interior el color de los espacios se vuelven más intensos y como ejemplo se tiene el teatro principal que es completamente rojo e impactante a la vista.

ARQUITECTURA: Polémico edificio : Daniel Libeskind

Después de la polémica que causó la suma estimada de 60 millones de euros que costaría la construcción del nuevo proyecto para la casa central de la Universidad de Lüneburg en la Baja Sajonia, finalmente se ha decidido avanzar con la obra. 

El irregular y pretencioso diseño del edificio viene de manos del arquitecto Daniel Libeskind, el arquitecto estadounidense de origen judío. Conocido en el mundo entero por sus peculiares diseños, tales como el Museo Judío de Berlín o el Museo de la guerra en Manchester, Inglaterra.

El edificio pretende ser un icono dentro de la ciudad. Su gran tamaño y ventanas trapezoidales, dan casi por seguro que el nuevo modelo destacará por sobre las antiguas y gastadas construcciones de ladrillo predominantes en el paisaje urbano de Lünenburg. 




El ambicioso proyecto cuenta con una sala de conferencias, contigua a una casa de huéspedes, cosa que simboliza la transformación que ha experimentado la universidad en los últimos años.